ENTREVISTA AL CAPITAN DE LA ESCUELA DE GOLF
Manuel Gómez Trigo es el capitán de la Escuela del Real Club de Golf Las Rozas de Madrid. Es profesional desde hace más de 20 años y lleva coordinando las clases para los alumnos de nuestro club más de 15 años. Él es Lolo, como le conocemos todos.
– ¿Cómo empezó a jugar al golf?
– Empecé en este deporte como cualquier niño, por diversión. En poco tiempo hice amigos en este mismo club, que aún mantengo, con los que jugaba todas las semanas. Con los años, el golf se convirtió en mi única pasión. Practicaba todos los días y competía siempre que podía, hasta que logré convertirme en profesional. A día de hoy tengo como objetivo transmitir mi pasión y experiencia a todos los jugadores jóvenes para que puedan cumplir sus metas en el golf.
– ¿Cuál es el funcionamiento de la Escuela del Real Club de Golf Las Rozas de Madrid?
– En la Escuela hemos diseñado diferentes tipos de programas y clases para enseñar a los jugadores la forma correcta de jugar al golf y de mejorar su técnica. De esta forma les enseñamos a ser competitivos a través de habilidades técnicas, físicas y mentales como la concentración y la constancia. También serán capaces de jugar cualquier torneo correspondiente a su categoría.
– ¿Y en qué consisten las clases?
– Las clases son dinámicas. Por un lado tenemos las clases técnicas en las que combinamos el juego corto, en las zonas de approach y putt, con el largo, en el campo de prácticas, con ejercicios personalizados y supervisión para ayudar a los alumnos con su swing. Además, hemos añadido a las clases la preparación física. El golf requiere una combinación de fuerza, flexibilidad, coordinación y resistencia; elementos imprescindibles que necesitan los jugadores para alcanzar su mejor versión.
– ¿Cómo supervisan los profesores a los alumnos?
– Llevamos un registro de todos nuestros alumnos de forma individual. Los profesores conocen a cada jugador, sus errores más comunes, y actúan de acuerdo con las necesidades y habilidades de cada uno.
– ¿Son todo clases prácticas?
– Ni mucho menos, es crucial que un jugador conozca correctamente las reglas y por ello se imparten clases teóricas en un aula especializada. Pero por supuesto lo divertido tiene lugar en las clases de campo, útiles para que los alumnos pongan a prueba todo lo aprendido. Con estas clases adquieren experiencia y es donde realmente aprenden de sus errores.
– ¿De qué forma agrupan a los jugadores?
– Organizamos a los jugadores según la edad y el nivel para formar amistades y que puedan competir entre ellos. Así conseguimos que la camararadería y la competitividad sean motivaciones extra para venir a entrenar. Queremos que nuestros alumnos disfruten de un ambiente deportivo, motivador y amistoso en el que puedan aprender a jugar al golf, hacer nuevos amigos, divertirse en las clases y profesionalizar su juego.
– Y además, fomentando la competitividad entre ellos…
– Todas las clases incluyen siempre una actividad competitiva (torneo de putt, driver más largo) con la que se ganan puntos y premios. Dicho de otro modo, todas las semanas tienen la oportunidad de conseguir un pequeño premio (bolas, guantes, gorras…).
– Pero también hay torneos para los alumnos de la Escuela…
– Efectivamente. Hemos creado una Liga por puntos en la que participan todos los jugadores de la Escuela. Aquellos que muestren esfuerzo y resultados en los torneos se ven recompensados con importantes premios. Enseñamos a los alumnos las diferentes modalidades que existen en golf, aunque las que más utilizaremos en los torneos internos serán Stroke Play (por golpes), Match Play (por hoyos), Scramble (mejor bola) y Stableford (por puntos). Todos los años organizamos torneos internos de la escuela, adaptando el campo a los diferentes niveles y edades para que puedan bajar hándicap. También hay torneos estacionales, como el de Navidad, en el que pueden acceder a premios mayores, o los campamentos de verano, más destinados al ocio.